martes, 12 de septiembre de 2023

SOLOS, primeros dos capítulos

 


SOLOS

La línea Maxon Dixon

La nieve que caía de forma parsimoniosa no había cubierto del todo las hojas del último otoño que se agolpaban en el suelo de forma desordenada. Los ladridos de un pastor alemán llamaron la atención de su dueño que paseaba en una gélida madrugada de enero. Nunca podría olvidar la imagen de los dos adolescentes abrazados, con la piel amoratada, quién sabe si por el frío o por la brutal paliza que debieron recibir. A su lado, sobre la tierra, una palabra escrita que estaba a punto de quedar difuminada: amor.

La primera inspección ocular del lugar la realizó el jefe de la policía local. Resultaba evidente que los autores del crimen no tuvieron ningún afán en ocultar sus pisadas en el barro que permitirían a la policía científica determinar el tipo de calzado y su número. Habían muerto a golpes de bates de beisbol que fueron abandonados allí mismo con abundantes manchas de sangre y restos de las víctimas. Solicitó al vecino, al que conocía desde la infancia, que se alejara para proceder con detalle a analizar las condiciones en las que se encontraban los cuerpos. Se tomó su tiempo en avisar a sus compañeros y al juez. Se colocó unos guantes de plástico sin mostrar apresuramiento.

Los dos chicos estaban casi desnudos; sus rostros denotaban tristeza, seguramente debieron morir horas después del ataque de, al menos cuatro o cinco personas, lo que dedujo de las huellas que se amontonaban alrededor. Dos varones, uno blanco y el otro de color. Diez días antes se había denunciado su desaparición, pero nadie había dado cuenta de ellos. En el instituto, ni profesores ni compañeros querían hablar sobre los jóvenes. Hacían una vida aislada del resto, ensimismados en su mundo, decían los profesores.

Para el inspector, lo más importante era evitar que se conocieran los detalles de cómo habían sido hallados. Con sumo cuidado los separó a una distancia suficiente para eliminar las pruebas de una posible relación que el oficial repugnaría. Una vez terminó, tomó su mechero y quemó los guantes que se volatizaron en apenas unos segundos. Se giró y descubrió el último mensaje de las víctimas. Se percató de que nadie lo observaba y con la suela de la bota lo borró.

No había transcurrido ni media hora que el lugar estaba acordonado. Numerosos curiosos se habían acercado, pero nadie decía nada. El silencio solo era roto por la llegada de los familiares que destrozados querían ver a sus hijos. Los periodistas intentaban adivinar los hechos, pero nadie hacía declaraciones, ni siquiera el alcalde.

Era una zona boscosa en el Medio Oeste, pero nada que ver con los grandes bosques de coníferas del norte. Las escuálidas ramas estaban desnudas y los troncos mostraban una apariencia decadente. Muchos árboles no se habían recuperado de la sequía y la bruma se confundía con la contaminación de la cercana central térmica que se había reabierto recientemente.

Los chicos habían desaparecido diez días antes. Salieron de la escuela por el camino de tierra que conducía al norte. Uno de ellos vivía en una zona deprimida habitada mayoritariamente por gente de color. El otro en una zona residencial de clase media alta. Siempre salían y caminaban juntos el trayecto común hasta que se bifurcaba. Ese día ninguno de los dos llegó a su casa.

La denuncia de su desaparición no se hizo esperar, pero ante la ausencia de evidencias de secuestro o de antecedentes violentos, la Policía trató la cuestión como una huida, por razones que seguramente se encontrarían en el curso de la investigación. La única forma de abandonar el pueblo era en coche o en autobús, y nadie del lugar dio noticias de ellos ni en la estación ni en las carreteras. Seguramente marcharían andando hacia la interestatal y allí algún camionero los habría recogido.

Sus compañeros y profesores fueron interrogados, pero nadie había visto nada. Eran dos chicos solitarios. Se relacionaban lo necesario y pasaban todo el tiempo juntos. Pero nadie se metía con ellos ni ellos con nadie. El pastor de la iglesia del barrio del chico blanco no conocía a la familia, aunque sabía de su existencia por los comentarios de otros vecinos que denunciaban su desafección a la parroquia. Quizás fueran los únicos de toda la zona que prescindían de la misa y de las celebraciones religiosas.

Nadie fue a preguntar al barrio del chaval de color, ni nadie fue a interrogar a su pastor. Ni siquiera recibió su familia la visita del alcalde para lamentar lo ocurrido y hacerse unas fotos. No quería encontrarse con una protesta vecinal, ni mostrar las calles de tierra, los postes de la luz medio caídos y los numerosos coches abandonados, saqueados por los chavales para sacarse unos dólares. En el barrio no había colegio electoral de manera que si podían votar debían acudir al centro de la ciudad, donde se construyeron las casas más opulentas y la policía prestaba sus servicios con más rigor. Lo cierto es que nunca votaban y eso les hacía insignificantes a los ojos de la comunidad.

Se organizaron algunas batidas para encontrarlos, pero no se presentaron muchos voluntarios y a los dos días, todo había vuelto a la aparente normalidad. Sin embargo, al vecino, dueño del pastor, sí le llamó la atención que los cuerpos no estaban escondidos, y el lugar se hallaba a menos de tres kilómetros del instituto. Resultaba muy evidente que nadie se había tomado en serio la búsqueda. Cuando el sheriff del condado se percató de que los periodistas acosaban al vecino que había descubierto los cuerpos, lo tomó por el brazo y lo alejó a un cobertizo cercano. Lo amenazó con detenerle y enviarle a la prisión del estado por cualquier causa si contaba a alguien lo que había visto. Su versión debía ser que divisó algo a lo lejos y llamó a la Policía sin acercarse.

El juez ordenó la autopsia y envió las fotografías y las pruebas al departamento de científica de la policía del estado. El dictamen del forense fue la de muerte a consecuencia de una congelación. Habían recibido numerosos golpes en la cabeza, pecho y piernas que le impidieron moverse o pedir auxilio. Sus teléfonos no estaban en el lugar así que seguramente alguno de los autores del crimen debió destruirlos para evitar pruebas. La mayoría de las evidencias fueron desechadas por contaminación. No se encontraron huellas en los bates y las pisadas habían sido borradas sin percatarse por los primeros policías que llegaron al lugar.
 
Fueron enterrados al día siguiente, cada uno en su cementerio. Solo los familiares cercanos y algunos vecinos asistieron. Ninguno de sus compañeros o profesores acudió ni siquiera a mostrar sus condolencias. Ni grandes elegías, ni siquiera una protesta tibia contra el sistema. Lo importante era retornar a la apacible vida de la comunidad. A las pocas semanas, y siguiendo el consejo del alcalde, ambas familias abandonaron el estado y nadie sabe qué fue de ellos.








Sábado, 20 de enero 2029

Todo estaba preparado en Washington D.C. para la toma de posesión del presidente Bill Sanders. Como ya es tradición, el frío era intenso y el Potomac estaba congelado. La ciudad estaba prácticamente tomada por la Policía y el Ejército para asegurar la normalidad del acto. Todo se había cuidado con excesivo detalle teniendo en cuenta las circunstancias de la elección y la propia personalidad del ganador. 

Se había reforzado la seguridad ante las miles de amenazas recibidas, lo que constituía una novedad en la historia reciente del país. Los preparativos eran demasiado evidentes y quizás ese era parte del objetivo del dispositivo. Se habían instalado baterías de misiles en las azoteas de los edificios circundantes, tiradores de precisión en ventanas y balcones. El tráfico de acceso al centro estaba cortado desde la noche anterior y también se había cerrado toda la Capital al tráfico aéreo. Se habían establecido varios anillos de seguridad y todas las alcantarillas estaban selladas después de haber sido inspeccionadas.

En todas las esquinas y plazas, se habían estacionado vehículos blindados de la Guardia Nacional. Desde el día anterior regía el toque de queda. Todos los trabajadores fueron enviados a casa. En el FBI y el Servicio Secreto la tensión era máxima, y todo estaba previsto en su planeación.

A los pies de las escaleras del Capitolio se colocaron cinco mil sillas para el público invitado. El resto de los asistentes debían permanecer en el Mall, detrás del Obelisco a Washington. Desde allí, unas pantallas gigantes permitirían seguir la ceremonia. A las siete de la mañana se abrió el acceso. Cientos de policías estarían encargados de cachear a todos los asistentes. A pesar de los requerimientos del presidente electo para que los asistentes pudieran ejercer su derecho a portar armas en el acto, el FBI lo desestimó. Desde el centro y sur del país, los feudos electorales de Sanders donde cimentó su victoria, acudieron miles de enfervorizados seguidores del partido republicano que había cambiado su nombre por «Only America». La inmensa mayoría de raza blanca. Aunque hacían mucho alboroto, no conseguían llenar el vacío al que la ciudad había sido sometida. En las calles no se notaba alegría, más bien se palpaba una tremenda tensión ante los cambios que se avecinaban con la nueva presidencia.

La inmensa mayoría de los asistentes habían viajado en autobuses, aviones y en vehículos propios, sumaban decenas de miles de enfervorizados hooligans. Sanders quería hacer una demostración de fuerza en la Capital, a la que durante la campaña señaló como «centro de latrocinio y de expolio de los buenos americanos». De cientos de parroquias habían salido autobuses fletados por los pastores que habían sido el principal apoyo en la campaña presidencial. Movimientos supremacistas, sindicatos de camioneros, motoristas que llegaban a miles en sus Harley Davidson, completaban el panorama de ese veinte de enero.
La Guardia Nacional, que unos meses antes había acompañado al ex presidente fallecido a lo largo de la avenida Pensilvania, ese día rendía honores al nuevo mandatario.

Una hora antes del comienzo de la ceremonia se abrió la tribuna de invitados, mientras que un coro del templo del Juicio Final, construido en Wisconsin, patria del nuevo presidente, amenizaba el acto con cantos religiosos. Allí debían sentarse los congresistas y senadores, altos funcionarios, empresarios, cuerpo diplomático, representantes del mundo de la cultura, pero cuando estaba a punto de comenzar el acto, la mitad del aforo permanecía vacío. Sanders había ganado las elecciones habiendo señalado como enemigos a muchos de los que debían sentarse allí.

El nuevo presidente había conseguido en unos pocos años romper con el viejo sistema de partidos. La tibieza del tradicional partido del elefante con cuestiones claves para una buena parte de la sociedad como el aborto, las relaciones con Europa, la pena de muerte o la arrogancia del establishment, lo llevaron a una escisión sin precedentes. La división de los moderados en dos o tres partidos y el sistema mayoritario hicieron el resto. Esta vez no hubo discusión, Sanders alcanzó los 279 votos del Colegio Electoral, y se convirtió en presidente. Poco importaba su escasa presencia en las Cámaras, tenía suficientes instrumentos para imponer su agenda. Nadie de la Administración saliente acudió; aquel resultado electoral representaba lo opuesto a todo lo que habían defendido durante sus dos mandatos.

Solo el anciano expresidente Trump acudió a la ceremonia, estaba exultante. A pesar de los numerosos intentos de la fiscalía para que fuera condenado, sobrevivió a todos los intentos, pero fue incapaz de convencer de su honestidad al pueblo norteamericano, que terminó eligiendo a un desconocido congresista de Wisconsin que había conseguido duplicar los recursos de demócratas y republicanos para la campaña.

El mundo estaba expectante ante su discurso inaugural. Los antecedentes habían generado un gran impacto en todas las cancillerías, especialmente entre las aliadas, pero nadie hasta ese fatídico sábado de noviembre previó que este joven radical de Wisconsin al que se había acusado de lazos con Eduardo Noé, el líder del movimiento «America for God», asesinado en México por unos sicarios después de descubrirse lazos con el narcotráfico pudiera llegar a ser el siguiente inquilino de la Casa Blanca. Pero su red de poder llegaba a los juzgados, cámaras estatales, iglesias y estaciones de policía. Una red de más de dos mil emisoras de televisión por todo el país daba voz a sus ideas, que cada vez eran más radicales. Pero esto daba igual, millones de personas seguían sus mensajes con una fidelidad inquebrantable. La veracidad de la información no era importante, lo relevante era que fuera consecuente con los objetivos políticos.

Muchos dudaban de que finalmente pudiera llevar a cabo las políticas que había anunciado durante la campaña. En Europa se confiaba en la fiabilidad del sistema político norteamericano y en la descentralización del poder que impediría a un presidente sobreponerse a la voluntad de los ciudadanos y de los estados. Restablecer los lazos con Rusia y terminar con el apoyo a Ucrania en su interminable enfrentamiento con Moscú, era una de sus prioridades. Disolver la Alianza Atlántica y duplicar el gasto militar eran sus objetivos inmediatos en política exterior. Sentía una especial aversión contra Europa y por sus políticas que consideraba contrarias a la ley de Dios, algo que en su cabeza no entraba de ninguna manera. Dios debía hacer algo con esos liberales europeos, y si no, quizás él sería la mano ejecutora.
 
Su discurso no defraudó a sus seguidores. Prometió la prohibición del aborto en todo el territorio nacional, del matrimonio homosexual. Derogaría asimismo las normas que favorecían a colectivos LGTBIQ y a minorías en el acceso a empleos públicos y privados y a consejos de administración. Se comprometió a eliminar cualquier vestigio socialista en los sindicatos y animó a suprimir las donaciones a movimientos feministas que atentaban contra los principios básicos de la sociedad americana. En la necesidad de atraer a las fortunas del país avanzó reducciones de impuestos, abandono de las medidas contra la contaminación, tanto nacionales como internacionales, liberalización del suelo. Se comprometió a reducir el empleo federal en un cincuenta por ciento, lo que afectaría sobre todo a las personas de color.

Su público, enfervorizado aplaudía sus promesas, que eran respondidas por el candidato con la misma expresión: «con la ayuda de Dios». Terminado el acto, todos los asistentes entonaron cantos religiosos ante el asombro de los invitados extranjeros que abandonaron el lugar con premura ante la posibilidad de que se produjeran hechos violentos. Aunque estaba prohibido portar armas durante el acto, nadie dudaba que en los maleteros de los coches de los miles de visitantes aparcados en la zona del aeropuerto Reagan se amontonaría un enorme arsenal.

Como es tradición al llegar al despacho oval firmó tres órdenes ejecutivas: el indulto pleno al ex presidente; la obligatoriedad del rezo en las escuelas y en los trabajos al comienzo y final de sus actividades y la expulsión de las fuerzas armadas de todos aquellos que no fueran heterosexuales. Así fue el primer día de la «Nueva América» que prometió Bill Sanders.

El presidente del Tribunal Supremo Isaías Marshall cumplió su cometido constitucional de tomar juramento al nuevo presidente, a pesar del abismo ideológico que le separaba de Sanders. Abordado por los periodistas al abandonar el Capitolio recordó la famosa cita de Abraham Lincoln de que América nunca sería destruida desde el exterior. Esa era la sensación que había dejado la victoria y el discurso de toma de posesión del presidente, el país podría entrar en una deriva en la que se acentuaran las divisiones y se fortalecieran los mensajes catastrofistas.

Esa misma noche en una vigilia ante la estatua de la Libertad se recordaban las palabras de Glover Cleeveland en la inauguración del monumento donado por Francia. 

We will not forget that Liberty has here made her home; nor shall her chosen altar be neglected. Willing votaries will constantly keep alive its fires, and these shall gleam upon the shores of our sister republic in the East. Reflected thence, and joined with answering rays, a stream of light shall pierce the darkness of ignorance and man’s oppression, until liberty enlightens the world.

No olvidaremos que la Libertad ha creado aquí su morada y no se descuidará su altar elegido. Su fuego se mantendrá vivo que brillarán en las costas de nuestra hermana la República Francesa, y desde allí, y juntos con los rayos de respuesta, una corriente de luz atravesará la oscuridad de la ignorancia y la opresión del hombre, hasta que la libertad ilumine al mundo.

El mundo estaba en vilo ante la posibilidad de que esta alianza por la libertad en las dos orillas del Atlántico se quebrara en mil pedazos y los cimientos del mundo actual de derrumbaran para siempre.





lunes, 16 de enero de 2023

GUERRA DE DIOSES. EDITORIAL UNIVERSO DE LAS LETRAS

 Dos formas de entender el mundo están a punto de llevar al planeta a otra guerra si es necesaria para la victoria definitiva de un bando. Un apasionante relato que nos llevará por los focos calientes de los tiempos que nos han tocado vivir.


Desde el profundo Sahel hasta Corea del Norte, y desde la América profunda a Europa, los acontecimientos se irán produciendo a una velocidad de vértigo. Nuestro protagonista se verá envuelto en una trama de dimensiones desconocidas que le llevarán a plantearse dudas razonables sobre la legitimidad de corrientes que amenazan al mundo occidental.

Frente al tradicional choque de civilizaciones, el mundo se radicalizará entre dos mundos, el radicalismo progresista y la conservadurismo de raíces religiosas; frente a ellos el modelo de libertades democracia se encuentra amenazado, incluso desde los propios gobiernos, y nadie sabe quién nos puede salvar cuando el gobierno puede ser la amenaza.





jueves, 10 de marzo de 2022

LOS PRIMEROS QUINCE DÍAS DE GUERRA EN UCRANIA


Alcanzado el decimoquinto día de la guerra, ya tenemos una información más precisa de las capacidades desplegadas por cada bando, de su operativa, logística, de su motivación y de las intenciones militares de ucranianos y rusos. Además disponemos de suficiente inteligencia para conocer las reservas que deberán llegar a Ucrania desde Rusia para mantener el pulso agresor y las que necesitarán los ucranianos para su defensa. Asimismo podemos ver con claridad que la estrategia rusa ha variado enormemente en la última semana con el claro objetivo de generar una profunda crisis en la sociedad civil ucraniana, aunque sea a costa de bombardear ciudades con una amplia mayoría de habitantes rusos, que claramente se están oponiendo a la invasión.


La Fuerza rusa. Sabemos que los mandos rusos decidieron transformar para esta invasión, una vez más, su estructura organizativa de batallones autónomos pensados para una guerra híbrida a la clásica divisionaria en la que cada cuerpo dispone de sus propias capacidades, desde la logística, a la defensa antiaérea, fuego y hombres. Los ciento cincuenta mil atacantes se concentraron en seis frentes y cada uno, con su cuerpo de ataque tipo división. Dos desde Bielorrusia para dejarse caer hacia Kiev desde ambas riberas del Dniéper; un frente hacia Járkov desde la frontera, otro más al norte hacia Konotop siguiendo la M02 para confluir con las fuerzas del norte que ya han tomado Cernikov en el cruce de la E-95 que baja desde el norte con la M02 y cercar Kiev por el este. Otra fuerza desde Rostov hacia Mariupol por los territorios rebeldes y desde Crimea con tres frentes, hacia al este para tomar Berdyaks, el oeste dirección Jerson y Odessa y el norte donde ya han alcanzado la central nuclear de Zaporizhzhia a unos doscientos kilómetros de sus puntos de partida.


Analizando los movimientos de tropas se visualizan dos intenciones claras; asentar el poder ruso al este del Dniéper, de teórica mayoría prorrusa, y dejar a Ucrania sin salida al mar. La pinza sobre Kiev se explica para hacer caer el gobierno y provocar una rápida involución. La ausencia de movimientos y operaciones en el este evidencian que la estrategia inicial rusa es provocar la caída del régimen antes que ocupar la mitad occidental del país. Sin embargo este enorme espacio vital en el Occidente permite a Ucrania disponer de líneas de suministros de armas desde Occidente y reclutar y preparar a los cientos de miles de movilizados, las últimas estimaciones hablan de unos cuatrocientos mil ucranianos armados.


A continuación analizo algunos aspectos concretos de las operaciones de estos quince días.


Escasa intervención de la fuerza aérea rusa. En los dos primeros días de combate la aviación junto a los misiles Iskander, lanzados desde tierra, destruyeron los radares, cegando a la aviación ucraniana que apenas opera unos veinte MIG-29 muy antiguos, así como baterías de misiles SA-300 de defensa antiaérea. Asimismo se atacaron una serie de bases aéreas con escasa precisión y fortuna. Rusia dispone en el teatro de operaciones con unos 300 aviones SU-30 y SU-35. Existen tres posibles razones concurrentes para esta escasa intervención si la comparamos con Iraq en 2003.

La primera es la escasez de munición guiada, de hecho en Siria sólo algunos SU-34 fueron capaces de utilizarlas, y según la inteligencia Occidental, el inventario es más bien bajo. Esto explica el amplio uso de bombas convencionales de escasa precisión. Para conseguir la precisión deseada los aviones de combate deben bajar de los diez mil  pies quedando al alcance de los Stinger que tardan unos cuatro segundos en alcanzar su objetivo. Igual ha ocurrido con los helicópteros. En Siria algunos convoyes era escoltados por helicópteros que sufrieron numerosas bajas por el escaso dominio del espacio aéreo. Finalmente, las bases occidentales de Kolomyja y Starokostiatyniv en el comando occidental desde la que operan los MIG 29 ucranianos no han sido atacadas, y esto explica que después de diez días, todavía Rusia no tiene el control del espacio aéreo. Quizás le quede a Ucrania una semana para perderlo si no recibe aviones operativos.


Los fallos de logística. Una estructura diseñada para batallones de guerra híbrida presenta unos requerimientos de logística totalmente diferentes de una invasión a gran escala. El ratio de unidades operativas y de logística es muy bajo, apenas un efectivo para cinco operativos, lo que ha implicado defectos en el suministro de gasolina, repuestos, talleres, alimentos, munición etc. A medida que se vaya ocupando territorio surgirá el problema añadido de la fuerza de ocupación. Cada vez son menos los hombres rusos que quedan para combatir. Si Rusia no duplica la fuerza hasta unos trescientos mil hombres en los próximos diez días, tendrá grandes problemas para avanzar y mantener asegurada la retaguardia.


La diferente motivación. Según los primeros informes de que disponemos al menos la mitad de las fuerzas rusas son militares que están cumpliendo con su servicio militar obligatorio, no son profesionales y sus edades ronda entre los dieciocho y veinte años; con apenas unos cuatro meses de entrenamiento y desplegados durante meses en campamentos  a muchos grados bajo cero. No comparten en una gran parte ni la misión ni están preparados para el combate como agresores. Los ucranianos no sólo están motivados en la defensa de su país, sino que conocen el terreno y al menos en el peor de los casos están equiparados en experiencia a los rusos. A medida que los combates sean más duros y agresivos, podremos ver cómo esta situación afecta negativamente a la moral del atacante.


El retraso en alcanzar los objetivos puede cambiar el curso de la guerra. Si analizamos el mapa, Rusia apenas ha conseguido entrar en el sur más de doscientos kilómetros, mientras que los avances en Oriente y Norte son inferiores a 100 kilómetros, debido sobre todo a la mala planeación de las operaciones y los medios. En estos quince días, Ucrania ha tomado conciencia de la realidad, ha conseguido reclutar una fuerza que seguramente hoy triplica a la rusa y ha recibido una cantidad ingente de material muy apropiado para la defensa del territorio, y que no requiere de preparación. Mi hijo de diez años era capaz de manejar el C-90 en el simulador con cero experiencia. Ucrania necesita armamento ligero y de alta movilidad para vencer al pesado y lento ejército ruso, y cada día que pasa, Ucrania está mejor preparada y Rusia peor.


El equipamiento ruso. Mucho se ha hablado en estos días de que Rusia no está usando su mejor armamento en Ucrania, y se citan muy diversas razones. Pero la realidad es que los programas de rearme ruso han chocado en los últimos quince años con la burocracia, la escasez de presupuestos y el déficit tecnológico en muchos campos. El programa de armamento (SAP 2008-2017) según los datos del propio ministerio ruso sólo alcanzó en 70% de sus objetivos, debido sobre todo a los bajos precios del petróleo y el gas en el periodo, un 30% inferiores a los previstos en el programa. Hay áreas donde no se alcanzaron ni el 20% de sus objetivos.


Si nos fijamos en el armamento terrestre apenas se han modernizado unos cientos de plataformas T-72 hacia el T-72B3 y B3M y en menor medida los T-90M. Sin embargo los programas de nuevas plataformas no han sido exitosas- Del T-14, apenas se han entregado unas docenas de unidades y el T-15 IFV sigue en pruebas con numerosos problemas. Se recibieron algunas baterías del autopropulsado de 155 mm Koalitsiya y se han modernizado unas doscientas unidades de los antiguos de 203 mm que si están en operación en Ucrania En el campo de misiles y unidades lanza cohetes, los avances han sido más significativos. Los iskander con un alcance de 500 kilómetros han sido desplegados, y se han modernizado el MLRS BM-30 y el BM-21 Grad. En cuanto a los blindados sobre ruedas se han realizado mejoras muy limitadas sobre los BTR-80.


En cuanto a las fuerzas aéreas, el anterior programa de modernización, con el reemplazo de las viejas plataformas SU-27 y MIG_29 por los nuevos SU-34 y Su-30 ha sido muy lento. También se ha abordado la modernización de las flotas de helicópteros con los Mi 28N Havoc y el K-52 de ataque Hokum, mientras que la flota de transporte de ala rotatoria descansa sobre los viejos Mi-26 y Mi-8 y la de transporte sigue siendo muy antigua.


Es decir, que los tan cacareados nuevos sistemas de armas o no existen, o no se han integrado en las unidades o sufren enormes retrasos. Podríamos decir que Rusia es un gigante militar que desprovisto del armamento nuclear sería derrotado si se empeñara en una guerra más amplia contra la OTAN.

 

El equilibrio de fuerzas. El gran error ruso es que no planteó la operación como un  torrente de fuerza y rapidez para destruir la capacidad militar ucraniana y derribar al gobierno, también es cierto que nunca en su historia han sido capaces de alcanzar esta experiencia. Básicamente Rusia le ha cedido a Ucrania dos semanas para prepararse y el 90% del territorio nacional. Disponer de fuerza aérea o de elementos pesados de combate no les serviría a los ucranianos, ya que serían rápidamente detectados y eliminados, de ahí que todas sus posibilidades de defensa se basen en armamento ligero y fácilmente desplegable. El problema es que les exige acercarse muchos a las unidades rusas, pero éstos se ofrecen a pecho descubierto lo que les está produciendo pérdidas enormes, casi un diez por ciento de los carros y blindados rusos están dañados o inmovilizados. No obstante, la victoria ucraniana depende de un flujo continuado y creciente de material desde Occidente, y necesitan mejorar su capacidad antiaérea de más alta cota, artillería ligera 106mm, morteros 81mm y sobre todo granadas y munición. En este tipo de enfrentamiento con su superioridad numérica sus opciones ganan sustancialmente. Los bombardeos rusos apenas están dañando a esta capacidad de combate.


¿Cuáles son los escenarios para las próximas semanas?. Si Ucrania resiste y dispone del oeste del país para suministrarse de armas y es capaz de organizar una resistencia interna en las ciudades ocupadas, veremos una guerra larga, quizás meses, con una brutal represión en las zonas ocupadas y que seguramente culminaría con un gran despliegue de destrucción por parte de Rusia, o un cese de actividades militares para hacer una Ucrania inviable a medio plazo, algo parecido a lo de Chipre.

 

Rusia siempre ha utilizado el terror para amedrentar a la población civil y crear un sentimiento de resignación ante la derrota, y en esta clave se entiende la destrucción perfectamente definida de ciudades y de ataques a la población civil. Sin embargo, si bien podrían matar a decenas de miles de ucranianos, están generando una reacción internacional y en la propia Ucrania de mayor resistencia. Por lo que me cuentan mis amigos rusos, ya es voz pública en Rusia los miles de muertos y la destrucción que están produciendo las tropas rusas, lo que está haciendo que el apoyo a Putin esté cayendo en picado.

 

El gran riesgo de Ucrania es que caiga la capital y el presidente desaparezca, sin que seamos capaces de definir cuál sería la motivación de los soldados ucranianos en este caso; la supervivencia de Zelenski en el conflicto es clave para la motivación propia y el mantenimiento de la ayuda internacional.

 

Quizás si la guerra se alarga demasiado y Rusia teme que, si se le va la mano, habrá reacción Occidental, propondrá una paz rápida requiriendo la neutralidad y el reconocimiento de la anexión del Donbass y Crimea. Si las tropas rusas se atascan en la toma de Kiev, llegan las lluvias, y son incapaces de avances significativos sobre el terreno, los ucranianos tendrían una oportunidad incluso para recuperar territorio. En definitiva, si antes de comenzar la invasión nos imaginábamos un 1940 con la Blitzkrieg, ahora estamos en 1942 en el Alamein y Stalingrado, es decir podría cambiar el curso de la guerra, pero todavía con resultado incierto. Estamos como diría Churchill en sus memoria de guerra en “el gozne del destino”.

 

 

Día 11 de marzo 2022

 

 

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domingo, 6 de marzo de 2022

ILYIN: EL LOCO IDEÓLOGO DE PUTIN


En las últimas semanas asistimos a una discusión sobre el estado mental de Putin y  la naturaleza de su ideología. La buena noticia es que Putin no actúa por impulsos, la mala es que su ideología es tan aberrante como “Mein kampf” o el “ Libro Rojo”

El gran ideólogo del fascismo cristiano ruso, Ivan Ilyin, nació en 1883 y murió olvidado en Suiza en 1954, después de haber escrito numerosos libros que cayeron casi en el olvido. Cuando Putin personalmente se encargó de trasladar sus restos a un monasterio que había acogido a la sede de la seguridad de los soviets, donde se hallan los restos de miles de víctimas, nació el neofascismo cristiano ruso, inspiración ideológica de Rusia Unida y su ideología oficial nacional-conservadora y de su presidente, Vladimir Putin. 

 

La filosofía de Ilyin influyó en numerosos jerarcas postcomunistas, aunque su mayor defensor y propagador fue el intelectual y director de cine Nikita Mijailov, hijo del autor del himno de la Unión Soviética, que escribió numerosos artículos sobre Ilyin y que tuvo la idea de transferir los restos de éste al monasterio de Donskoy, donde el filosofo había soñado tener su última morada. En 2005, se reeditaron en Rusia en veintitrés volúmenes sus obras, por si tienen interés en conocer más de cerca al personaje y disponen de tiempo.

 

Después de abandonar la Unión Soviética, afirmaba que la única esperanza de Dios era que una nación justa siguiera a un líder hacia la totalidad política y que comenzara la redención del mundo, estaba claro a qué se refiere. Podría ser un digno heredero de Rasputín, ya que combinaba a Freud, que entendió que el problema de Rusia era de inocencia sexual, con Hitler y con el fascismo italiano, vamos una mezcla explosiva. Terminada la guerra, se distanció del fascismo y regresó al autoritarismo de corte comunista como única solución a los eternos problemas de Rusia.

Ilyin estaba convencido de que los gestos audaces de líderes audaces podrían comenzar a deshacer el carácter defectuoso de la existencia. En su aberrante visión, las democracias habilitaron al comunismo y por eso deben ser destruidas. La única forma de erradicar el mal es eliminar a la clase media y destruir la sociedad civil transformándola en una conciencia de sumisión nacional, y de ahí lo poco que le preocupan a Putin las sanciones, van a ser el instrumento para eliminar a eses gran enemigo de los totalitarismos que es la clase media.  Por esa razón, Ilyin abogaba por la destrucción de los gobiernos soviéticos y europeos y veía en la llegada del fascismo ese “ acto de salvación” . Incluso abrazó el antisemitismo que Putin destila cada vez que habla de Zelenski, alabando la idea judeo-bolchevique que unía ideológicamente a los blancos que se opusieron a la revolución con los nazis y que no nos es tan desconocida. El pobre y religioso, casi esotérico, campesinado ruso vio en los judíos el enemigo que los alejaba de Dios. 

Siempre aludía a la “inocente Rusia”, rodeada por enemigos que pretenden aprovecharse de ella, sin que ésta tenga al líder que la haga respetar entre sus expoliadores. Para Ilyin, el mundo era corrupto y necesitaba de una redención y es la Rusia inmaculada la llamada a satisfacer esa necesidad divina. Argumentaba que Rusia siempre estuvo sometida a un bloqueo continental  lo que le había obligado a una autodefensa inaceptable. Es decir, se vinculaba a la misma falacia creada por el partido comunista de que el mundo deseaba que el estado soviético pereciera.

Según interpretaba Putin a Ilyin en un discurso de 2014, “Libertad para Rusia no significaba libertad para los individuos sino que los rusos se sientan libres de formar parte de un todo”, obviamente es un concepto de libertad muy ajeno al nuestro. Con el control de los medios arrebatados a los oligarcas, Putin comenzó en 2005 a rehabilitar a Ilyin como su ideólogo, y Vladisvav Surkov, el Goebbels de Putin, encontró una ideología con la que bombardear al pueblo ruso y a sus agentes por todo el mundo. Medvédev, llamado a perpetuar a Putin cuando éste sea presidente emérito en 2036, siempre exhorta a los jóvenes a leer a Ilyin como si fuera el Libro Rojo y es citado continuamente por las autoridades religiosas y políticas.

Hace años conversaba en Moscú con un alto funcionario comunista de la Unión Soviética, ya mayor. Explicaba que el fracaso de la URSS se debía a que Dios les había castigado y que por eso entonces todos los comunistas iban a misa diaria. Putin representaba los modos y maneras del estalinismo, pero ahora abrazados a una causa nacional ortodoxa. Putin, me decía, había conseguido por fin una ideología autoritaria que superaba a los dos extremos, con el objetivo final de la supremacía del estado sobre el individuo, y por eso encuentra adeptos en los populismos de todo signo, sin reparar en medios.

Cuando Putin regresó en 2012, decidió llevar a cabo el mandato de Ilyin, acabando con el estado de derecho para perpetuarse en el poder y culminar la obra sin las ataduras que debían destruirse para evitar la corrupción del inocente pueblo ruso. Cuando Rusia invadió Crimea, fueron enviados a todos los gobernadores y pro-rusos de Ucrania “las tareas de Rusia” obra del Carl Schmidt de Putin. Hoy aprovechando el viento de la guerra está convirtiendo a Rusia en una autocracia.

¿Y qué ha dicho Putin basándose en los libros de Ilyin? En Izvestia, en octubre de 2011, anunció la creación de una Unión Euroasiática que reuniría a los estados que no habían logrado establecer el estado de derecho, entendido a su manera (Ucrania). En 2012, citando también a Ilyin, señalaba la necesaria integración entre estados, más como una virtud que como un logro. En Moskovskie Novosti, en febrero de 2012, Putin  expuso las conclusiones políticas “ Rusia como organismo espiritual no sólo sirve a las naciones ortodoxas, y no sólo a las naciones de Euroasia, sino a todas las naciones del mundo. Esta es su confluencia con el comunismo soviético, no se trata solo de la hegemonía sobre Europa, sino que tiene una visión mundial, de transformar el mundo como si él fuera el gran arquitecto.

Putin predijo que Euroasia superaría a la Unión Europea y que uniría a sus miembros en una entidad más grande desde Lisboa a Vladivostok”. Así que aquí tenemos definidas las ambiciones de Putin sobre Europa.

Según un artículo publicado en 2018, de Timothy Sneider, biógrafo de Putin en su obra The Road to Unfreedom: Russia, Europe, America (Penguin 2018) del que he tomado muchas referencias, la campaña rusa contra la decadencia de la Unión Europea iniciada en 2013, está de acuerdo con esta cosmovisión de Ilyin. Éste personaje tildó a Rusia de homosexual, posteriormente se sometió a terapia de psicoanálisis con su novia y luego culpó a Dios. A su vez, Putin primero se sometió a fotos cazando o con pieles, luego se divorció de su esposa y finalmente culpó a la Unión Europea por la homosexualidad rusa que él está llamado a erradicar. 

 

La llegada de Putin al poder en 2012 desde dentro como Hitler en 1932, supuso el paso de las formas legales al colonialismo en sus relaciones con terceros países. El propio Ilyin aludía a Ucrania y Rusia como un solo pueblo, y por eso Putin anexionará a Ucrania, tal como dijo en su discusión de declaración de guerra. Cuando Ucrania tomó el camino de Europa, ordenó la matanza de manifestantes y cuando su aliado Yanukovich perdió el poder, sentenció a Ucrania a la que acusó de poseer todos los males del corrupto Occidente siendo encima el origen de la religión oxtodoxa.

En la justificación de la anexión de Crimea ante la Duma, Putin volvió a citar a Ilyin y a la creación de un todo orgánico basado en los principios de este loco que hoy domina las mentes de los jerarcas del Kremlin. El comandante ruso que dirigió a las tropas en el este de Ucrania sentenció, siguiendo al gran líder espiritual, en 2014 “ si el mundo se salvara de construcciones demoniacas como los Estados Unidos, sería más fácil para todos vivir, Y uno de estos días sucederá”. 

En el fondo, este neofascismo no es muy diferente del comunismo que tanto criticó. Son dos "religiones" que tienen una ambición universal, que ven en la libertad una amenaza y en los derechos de los pueblos un obstáculo a la necesaria redención del mundo ordenada por Dios o por Marx. Y por eso Putin encuentra tantos adeptos entre los neofascismos en Occidente y entre los totalitarios populistas de aquí y de allá.

En estos días, Putin está dando un autogolpe de estado en Rusia, las leyes que se están aprobando conducen a la dictadura y a la eliminación de las clases medias como el mayor seguro, tal como escribió Lenin, para perpetuarse en el poder. Es como si Laurenti Beria hubiera tomado el poder en Rusia.

Los amenazados somos el mundo de libertades, igualdad y derechos nacido en 1945, y las ambiciones de Putin son claras. Y lo más aberrante y peligroso de toda esta situación, es que un perfil como el descrito encaja con la liberación del mundo con el holocausto nuclear, si es necesario. Así que mejor pongámonos manos a la obra y paremos esto antes de que sea tarde para TODOS.

 

 

domingo, 14 de julio de 2019

ESPAÑA DEFENDIDA

Transcurría el año de 1612, ya inmersos en lo que los historiadores usan llamar " La decadencia española", que don Francisco de Quevedo con el que mantengo una vida compartida, madrileño por los cuatro costados y manchego de adopción , publicó " España defendida de los tiempos de ahora y de las calumnias de los noveleros y sediciosos". 

Realmente no se me ocurriría mejor título para un blog que siempre ha buscado razones y verdades que explicaran los acontecimientos de nuestra historia reciente, y que alzara la voz contra el simple acatamiento al orden establecido y sobre los salvapatrias que siempre esconden malignos objetivos.

Podría parecernos anacrónico que siempre tengamos que estar defendiendo la nación española, pero ¿Contra quien?, pues contra nosotros mismos. No vienen de fuera nuestros enemigos, sino que somos nuestra principal amenaza. Hallar las raíces del problema y buscar las soluciones son una tarea hercúlea, pero necesaria, para un país que reúne tantos atributos. Una nación que no se explica tan escasa autocomplacencia, si no fuera porque, o bien, todos los logros son productos del azar, o bien somos la consecuencia de algunas mentes brillantes, más bien escasas que han liderado esta sociedad. Pero no nos engañemos, ni nuestros logros son producto de la suerte, ni hemos tenido grandes líderes políticos que guiarán los pasos del reino. Es más, hay que decir que las escasas mentes brillantes que alcanzaron el Olimpo político español fueron defenestrados, asesinados o encarcelados.

El título de esta magna obra de lectura obligada, establece ya tres enemigos atroces: En primer lugar los tiempos de ahora; luego las calumnias de los noveleros y finalmente las de los sediciosos, y sin duda acierta de pleno el padre de la sátira española.

Los tiempos de ahora son, como siempre, convulsos, y adolecen de los mismos defectos del pasado. Un inconformismo permanente con las estructuras del estado; una lenta y escasa adaptación a los cambios y sobre todo la ausencia de grandes liderazgos.

Salvo cortos periodos de tiempo, lo único que el ciudadano ha recibido del estado ha sido miseria y dolor. No es parcialmente hasta el franquismo, bajo un régimen dictatorial basado en el chiringuito, y posteriormente en democracia, que el estado se ha puesto al servicio del pueblo, y apenas hablamos de un periodo inferior a un siglo. Es decir, genéticamente nuestro ADN todavía recela mucho del poder político. Sin embargo, en lugar de alzarse en revoluciones, siempre ha terminado adaptándose pasivamente al sistema, ante la pereza o el pesimismo

Pero el español ha aprendido en estos últimos cuarenta años de expansión del gasto público, que el estado no solo es benefactor sino repartidos de dádivas. Es decir, una inmensa mayoría, empresarios, jubilados, desempleados, nacionalistas, critican con exacerbación al poder mientras ponen la mano para beneficiarse de esa gran bolsa de euros, que no está financiada tanto por impuestos sino por futuro; es decir, nos estamos repartiendo el dinero de nuestros hijos y nietos, en la esperanza de que ellos puedan hacer lo mismo.

En definitiva esperamos todo del estado, seguridad, protección social, infraestructuras, rentas, pero en la creencia de que son otros los que financian este dispendio, cuando se equivocan; todo sale de este bien común que llamamos España. Siempre nos queda la creencia de que existe un reparto justo, como si el gobierno fuera Robin Hood; y que son los ricos, un concepto siempre relativo, los que pagan nuestras necesidades; pues no. Resulta que si les apretamos con impuestos no tienen el menor apego al terruño y se marchan, y al final perdemos más que ganamos. Así que en consecuencia, son las clases medias las que soportan un sistema de protección social que se expansiona como el universo, sin que nadie se resuelva a ponerle límites, en aras de obtener un rédito electoral cada cuatro años.

Todos los males de este país tienen que ver con una creencia generalizada de injusticia, de que se produce un reparto injusto entre ricos y pobres, por simplificar; entre territorios, entre ilustrados y analfabetos y entre cuñados y pueblos. Todas las tensiones de este país tienen que ver con un egoísmo exacerbado combinado con el anhelo de que alguien nos resuelva nuestra teórica indefensión. Nos equivocamos, sólo nosotros, entre todos, podemos resolver los problemas de todos; la política de dividir y vencer, fracasa cuando ya no es posible dividir más.

¿Y qué decir de las calumnias de los noveleros? Pues que primeros debemos definir quiénes son noveleros. No son los tertulianos, ni los escritores, se refiere a los políticos que venden obras de ficción como si fueran ensayos. Nos quieren hacer creer que todo lo que prometen es posible, y ya deberíamos haber aprendido que por mucho poder que se tenga, nadie por si solo, llámales gobierno, partido o alcalde, puede hacer gran cosa. Pero también debemos discriminar; frente a los noveleros que son capaces de defender la tesis y la antítesis sin despeinarse, existe una legión de hombres honrados que dignifican la política, aunque a menudo su buenísimo y honradez palidece ante los abusos de unos pocos.

Y finalmente los sediciosos; y de estos tenemos ejemplos muy significativos. Son regiones y son líderes políticos que se sienten diferentes del todo a fuerza de diferenciarse. Se han pasado la vida tomando rayos UVA y ahora dicen ser morenos para alegar su diferenciación. No nos debemos creer sus infundios, ni sus argumentos. En el fondo pretenden acabar con el régimen de solidaridad nacional para llevarlo al plano regional. Pero este microscopismo político no tiene fin; primero será Europa nos roba, luego España, luego Barcelona, luego Pedralbes y luego el vecino. En el fondo reniegan de la vida en comunidad con el único propósito de retener y no repartir. 


España defendida no es un alegato contra los enemigos en exclusiva, es también un foro que pretende imbuir una idea de España donde todos somos libres e iguales. Libres para ser, actuar y pensar sin más límites que la libertad de los demás, e iguales frente a la ley y frente a nuestros semejantes. Iguales en oportunidades y en obligaciones. De esta manera concibo una nación y un pueblo. España sin considerar a todos los españoles, y en especial a los más necesitados, olvidados o relegados, no es nada, es un concepto vacío. Amamos a España, a sus símbolos y a sus instituciones porque están al servicio de todos y sirven para crear un mundo más justo y avanzado. 

Pero debemos asumir que un mundo más justo sólo es posible con mayor desarrollo, sostenible sin duda, con crecimiento, con innovación, con emprendimiento. Nunca habrá justicia si no hay desarrollo. Repartir miseria o la riqueza actual entre todos, no nos hace ni más ricos ni mas justos, ni siquiera más felices, salvo cuando esa distribución contribuye al crecimiento económico y social.

En definitiva, defendemos a España, como nación, y todas sus gentes, con todas sus diferencias y especialidades. Pero no olvidamos donde estamos, en el corazón de España, Castilla; la Castilla reconquistada en un abrir y cerrar de ojos y que quedó aislada, desolada y empobrecida al quedar en manos de ordenes militares incapaces de generar riqueza en tan vasto territorio. ¿Cómo es posible tanta pobreza en el corazón de este gran país?; la región por la que transcurren millones de personas y decenas de miles de millones de mercancías; Primero fueron necesarias las infraestructuras y ahora necesitamos el talento y la inversión para posicionar a la región en un lugar de cabeza de España, y éste es un reto al que queremos contribuir, sobre todo porque creemos que es posible combinando ilusión, cabeza y visión.

Una visión no de salir del paso, ni de hacer más de los mismo, sino de una auténtica transformación, radical que posiciones a una región tan extensa y diversa en el liderazgo nacional del cambio, del progreso. mantener nuestro sentido común, y nuestros valores y fortalezas para crear una visión 2050, que posicione a la región entre las cinco de España con mayor renta per cápita, con una política de impulso, renovación, transformación y apertura al exterior.

A estos objetivos sirve España defendida; reflexionar y criticar para ser mas libres y más iguales.