sábado, 5 de octubre de 2024

¿POR QUÉ LOS AYATOLÁS LE TIENEN TANTA MANÍA A ISRAEL?

 

¿Por qué los ayatolás persiguen la erradicación de Israel?

La superioridad israelí ha dado vitaminas a los países sunitas para resistirse al expansionismo iraní. Eso explica la obcecación de Teherán con Israel.

Cohetes son interceptados por la Cúpula de Hierro de Israel. | EFE

Dos países separados por casi dos mil kilómetros, con países árabes sunitas de por medio, andan enfrascados en una guerra desde hace cuarenta y cinco años, sin que se conozcan realmente cuáles son las causas de esta inquina ni sus objetivos. Para entendernos hay que hacer un poco de historia.

Los chiitas, como musulmanes minoritarios empeñados en discutir la autoridad política de los omeyas y en imponer a los jefes religiosos como líderes políticos, han sido bastante maltratados a lo largo de la historia. La primera explicación práctica es muy sencilla. Siendo dos, los pilares que sucedieron a Mahoma, uno chiita y otro sunita, los que fundaron las bases del islamismo, apenas el 12% de la población musulmana es chiita, o sea que no han tenido ni la misma salud ni la misma seguridad que la otra rama. Durante siglos fueron los parias, perseguidos por todos los sunitas, y en especial por los mamelucos, que casi los exterminaron. Los pocos que quedaron huyeron por pies y se asentaron en Líbano y más al Oriente, buscando la protección de la lejana Persia. Eran como los judíos de nuestra Edad Media, pero en pobres e incultos.

Persia, que lleva dos mil quinientos años intentando, sin mucha suerte, dominar todo el Islam de la Península Arábiga, sufrió la invasión y el dominio sunita desde los inicios del Islam, hasta que en 1501 logró liberarse de este yugo. Necesitado de una legitimidad y de una ideología diferencial, adoptó el chiismo como religión oficial del futuro imperio persa, basada ni más ni menos que en el yerno y elegido sucesor por Mahoma, y aquí ya tenemos el lio montado.

Pero hasta en Persia, los chiitas fueron los parias de una sociedad clasista, dominada por la clase dirigente, que adoptó el chiismo como religión de interés, como los nobles alemanes inventaron el protestantismo, pero condenando a la mayoría de su población chiita a la miseria y la esclavitud. No les pasó algo muy diferente en Líbano y en Irak, donde sufrieron persecuciones y genocidios.

Así que cuando la URSS miró al sur dispuesta a una alianza teóricamente imposible entre el Islam y el comunismo, encontró en la oposición a la familia Phalevi, el caldo de cultivo para instaurar la lucha de clases en el Islam, donde los chiitas eran los oprimidos. En este poso ideológico se funda el régimen de los ayatolás para imponer la sharía a la minoría progresista y occidentalizada de Irán como forma de instaurar una república socialista islamista, increíble pero cierto.

Los Estados Unidos, mientras, aprovechándose del excelente trabajo de Lawrence de Arabia, consiguieron atraer a la casa de Saúd y fundar un estado de arena y beduinos, con petróleo a raudales casi al alcance de la mano, que habría de convertirse en el tapón entre las dos grandes potencias históricas de la región: Egipto y Persia. Pero los británicos percibían que se quedaban fuera de la tarta y consideraban que los Saúd eran de fiar lo justo. Ahí nace el Estado de Israel. Con esta idea pergeñada por Balfour y Churchill, se solucionaba un problema histórico de 2.000 años y se metía en medio de la olla a un país de occidentales con una religión que le sacaba unos seis mil años de ventaja a la musulmana. Es muy probable que los líderes occidentales no confiasen mucho en la capacidad de expandirse de Israel. Es más, el acuerdo de Partición era un acuerdo de extinción, tal y como fueron dibujadas las fronteras. Así que tampoco visualizaron mucho problema; si finalmente eran derrotados, habrían lavado nuestras conciencias.

Nada más declararse la independencia de Israel y la partición del territorio, denominado por los británicos Palestina, en un Estado judío y otro árabe, las dictaduras de alrededor se abalanzaron contra el primero. El Acuerdo de Partición implicó la Nakba, o la salida forzosa o voluntaria del nuevo estado de 700.000 palestinos a los que se negó el derecho de retorno. Nunca fueron bien acogidos por nadie en el mundo árabe y por ello fueron caldo de cultivo para las ansias soviéticas de promover el terrorismo en Occidente, aprovechándose de la tragedia palestina.

La Unión Soviética, muy interesada en quitarse una parte enorme del problema judío en Europa del este y asumiendo que su Dios había nacido judío, aprobó junto a Estados Unidos y el Reino Unido la Declaración de Independencia del Estado de Israel. En los tres años posteriores emigraron setecientos mil judíos desde Occidente, a los que habría que añadir el millón que, entre 1948 y 1970, fue expulsado de los países árabes. De esta Nakba no se suele hablar tanto. Luego, en 1973, fueron expulsados los palestinos de Jordania hacia el Líbano. De esta tampoco se suele hablar mucho. Pero vamos, una minucia comparado con los sesenta millones de desplazados forzosos por la partición de la India y los tres millones de muertes provocadas en los meses siguientes a la creación de dos estados confesionales diferentes, y esta tragedia no nos asalta todos los días

La URSS creó en los años cincuenta el panarabismo, y lo financió con un solo objetivo: sacar a las potencias occidentales del petróleo árabe y dominar el comercio mundial que transcurría por el canal de Suez. Consiguió su propósito parcialmente, ya que sacó a franceses y británicos con el apoyo de Estados Unidos, que se convirtió en la alternativa hegemónica al panarabismo, con unos fuertes lazos con Israel, Arabia Saudita y Persia. La URSS vio con claridad que el punto más débil de esta lista era Persia, con un emperador que sometía a su pueblo, especialmente al chiita, a una opresión y miseria impropias de un país inmensamente rico. Fue el Sha el que comenzó el programa nuclear en los setenta y fue el Sha el que convirtió al ejército persa en el dominador de la zona, mientras que los aliados de Moscú se hacían fuertes en Egipto, Líbano,Siria, Irak y Jordania. Por estas razones, Irak se embarcó en una guerra de ocho años con Irán: para detener el expansionismo iraní. Y por eso contó con el apoyo occidental.

Jordania, después de soportar un intento de golpe de estado palestino en 1973 y una guerra civil, que los palestinos denominan Septiembre Negro —nombre adoptado por el terrible grupo que aterrorizó a Occidente durante los años setenta—, cayó en el ámbito occidental. Egipto, con Sadat y los acuerdos de Camp David, giraba hacia Occidente, así que la URSS estaba a punto de perder la partida y optó por provocar la revolución en Irán y la invasión de Afganistán, los dos países más occidentalizados del mundo islámico. Hoy Bielorrusia e Irán son los últimos vestigios del bando soviético en la Guerra Fría. Y por eso mantienen un entendimiento tan especial con Putin.

La revolución de los ayatolás fue una pieza más de la Guerra Fría. La URSS atestaba un golpe mortal a los Estados Unidos y condujo al país integrista al odio a lo occidental, a lo norteamericano y, por supuesto, a Israel. Esas eran las señas de identidad que los separaban del mundo sunita, mayoritariamente tornado hacia Occidente.

Desde 1978, Irán ha luchado por convertirse en un actor estratégico, extendiendo su influencia por Irak, Siria, Yemen y el Líbano. Lo intentaron en Jordania, pero Hussein se salvó por los pelos. En Egipto con los hermanos musulmanes, pero Al Sisi les paró los pies. Y en los países del Golfo con presencia chiita significativa, pero los petrodólares hicieron bien su trabajo y en Yemen controlados por el ejercito Saudí. No cabe duda de que la superioridad de Israel sobre Irán, ha dado vitaminas a los países sunitas para resistirse a Irán y a su expansionismo, y aquí empezamos a entender la obcecación de Teherán con Israel.

En resumen, Irán nunca ha tenido el menor interés por la causa palestina, ni por los santos lugares de Jerusalén. Sus objetivos son mucho más geoestratégicos: volver a los tiempos del imperio aqueménida, que abarcaba desde Trípoli hasta las estribaciones de la India, Macedonia, el Nilo y, por supuesto, la tierra de judíos y fenicios. La Península Arábiga fue ignorada en aquella época, ya que allí no había nada de valor. Y quizás por ello nació el Islam en La Meca y en Medina: porque estaba alejada de los centros de poder de la época.

Algunos aducen que la alianza entre Hamás e Irán es contra natura. Y es cierto que, desde el punto de vista religioso, están muy alejados. Pero como pueblo oprimido y abandonado por el mundo sunita pro-occidental, Hamás ha encontrado en las bases del Irán integrista y socialista una guía, un apoyo financiero, una dirección militar y, sobre todo, una guía de legitimización. Todo ha sido fomentado por Irán, por supuesto. Y por eso Hamás se convirtió en un gigante militar: para meter cizaña en el mundo palestino y provocar una involución en la región que contribuyese a la destrucción de Israel. No hay causa histórica o política que explique el apoyo de Irán a Hamás, salvo su deseo de eliminar a la única oposición real que tiene en la región. Saben que si cae Israel, todas las potencias árabes caerán como piezas de dominó.

Israel se encuentra en una difícil tesitura: sola no puede destruir la capacidad militar de Irán. Podrá retrasar algunos programas de armamento, o dañar alguna infraestructura crítica, pero mientras siga el régimen político opresor, toda la región estará amenazada. Quizás a partir de aquí podríamos aventurar cuáles serán los hipotéticos objetivos de Israel en su respuesta a Irán. El único problema u obstáculo dependerá de las capacidades secretas que haya alcanzado Irán en el programa nuclear. Solo si existe la plena seguridad de que al descabezamiento seguirá un cambio de régimen que aporte estabilidad, Israel podría plantearse una operación similar a la de Haniya o Nasrallah. Pero como eso se antoja muy improbable, a todas las partes le bastará con ganar tiempo y reducir al máximo la capacidad militar del enemigo.

Israel, aunque esté en una retórica de guerra, no puede estar permanentemente en guerra. Su economía y su sociedad no lo permiten. Para un régimen autocrático, esto es simplemente un pequeño obstáculo con el que podrá vivir mil años más. Así que Israel tiene menos tiempo para alcanzar un objetivo militar suficiente que le permita tirar otros veinte años. Solo hay una barrera infranqueable para Occidente: Irán debe abandonar, por las buenas o por las malas, su programa nuclear. Si no, dentro de diez años tendremos la peor de nuestras pesadillas.

lunes, 23 de septiembre de 2024

ISRAEL NO MATTER HOW

 

Israel, 'no matter how'

Sin duda, el ataque a los beepers y radios de Hezbolá ha sido la acción más determinante y efectiva de la historia reciente.


Bombardeos israelíes en el sur del Líbano. | Cordon Press / CHINE NOUVELLE/SIPA/2402080851

Una vez, hace ya algunos años, preguntaba a alguien dos dudas que me asaltaban en relación a las operaciones de Israel contra sus enemigos. ¿Cómo recibía el Mossad instrucciones políticas? y ¿qué grado de atención le prestaban los primeros ministros a los operativos? Según me explicaba, el director del Mossad está entre los primeros en ser recibidos por el primer ministro y desde 1947 recibe la misma lacónica orden: "defender el estado de Israel, no matter how". Por regla general nadie del gobierno quería saber nada más, por seguridad y por mantener una distancia moral con los acciones, como una especie de seguro político. A la segunda cuestión, contestó que en la historia apenas dos primeros ministros gustaban de saber más sobre las operaciones y su desarrollo, Isaac Rabin y Levi Eshkol.

La historia del estado de Israel está llena de historias de una osadía y complejidad únicas que han contribuido a crear un sentimiento mezcla de admiración y miedo, pero que han mejorado de forma crítica la seguridad colectiva de Occidente. Desde el robo de aviones de Dasault en Francia que estaban bloqueados por el gobierno de De Gaulle a la firma de un contrato secreto entre Marcel Dassault —uno de los artífices de la existencia del Estado de Israel, claro que también armó a sus enemigos— para fabricar aviones Mirage que nadie sabe cómo y con qué apoyo fueron ensamblados allí, dando lugar al nacimiento de Israel Aircraft Industries. El secuestro de Eichman, la Operación Entebbe, la venganza contra los atentados de Múnich, llevado al cine por Spielberg, la contaminación con el virus stunex de las centrifugadoras que preparaban el combustible nuclear en Irán, la muerte del líder de Hamás y responsable de los ataques suicidas, Yahya Ayash en enero de 1996 haciendo explotar su teléfono, el asesinato con una ametralladora automática manejada a 1.600 kilómetros de su objetivo de Mohsen Fajrizadé, el director del programa nuclear iraní, y la muerte de Ismail Haniya con una bomba en su casa en Irán recientemente, que llevaba meses esperando que por las cámaras de seguridad de la vivienda apareciera la cara del siniestro ocupante.

Pero desde el punto de vista de la preparación, la complejidad de su desarrollo y sus consecuencias, sin duda, el ataque a los beepers y radios de Hezbolá, ha sido la acción más determinante y efectiva de la historia reciente.

Controlar los movimientos de los grupos terroristas aplicando la tecnología de comunicaciones ha sido una constante de todos los servicios secretos y por la misma razón, el Mossad ha sido pionero y líder en la aplicación de cada nueva tecnología que aparecía en el mercado. Existen diversos antecedentes inmediatos que demostraban este interés de Israel en los móviles para localizar o hacer explotar dispositivos, por lo que este ataque cobra mucha más importancia por las debilidades que presenta, al ser plenamente conscientes los terroristas de las intenciones de Israel.

Esta es una operación que se debió iniciar hace cuatro años y a la que se asignaron ingentes recursos, aun sabiendo que la probabilidad de fracaso era muy alta.

El primer paso fue convencer a los fabricantes de equipos muy reconocidos y nada sospechosos, en países más o menos lejanos de la órbita de las grandes potencias con intereses en la zona, de adquirir derechos de producción bajo licencia. Para dar confianza a los terroristas, debía tratarse de marcas muy conocidas para no levantar sospechas. Después de años de comprar equipos seguramente para su venta en Wallapop, el Mossad dio el primer paso, obtener a través de empresas pantallas de las miles que tiene el Mossad distribuidas por todo el mundo la licencia de fabricar. En el mundo de la externalización, nadie iba a prestar atención a dónde se fabricaban los equipos que no encierran ninguna tecnología especial.

Aunque hemos visto que la cantidad de explosivo altamente sofisticado era pequeña, unos 40/50 gramos por aparato, sumamos más de trescientos kilogramos de explosivos en total, lo que solo están al alcance de gobiernos y me lleva a pensar que los equipos fueron construidos en Israel o en un país en el que pudieran saltarse los controles de seguridad.

Pero esto era solo el inicio de la compleja operación. En segundo lugar, había que generar la convicción en los grupos terroristas de que era más seguro utilizar buscas y aparatos de radio tradicionales, que se escapan al control de las nuevas tecnologías. Esto requiere de algunos ingenieros al interior de la organización que convenzan a los líderes de cambiar todo el sistema de comunicaciones. Es decir, la persona que convence a los líderes y que se encarga de elegir los equipos forzosamente debería ser parte del plan, ya lo fuera conscientemente o por una suculente comisión, lo que no resulta extraño, teniendo en cuenta que estamos hablando de bandidos.

Solo faltaba encontrar un proveedor a la medida de un grupo terrorista, que quedara fuera de los controles de movimientos bancarios ligados a Irán o a la organización terrorista, que fueran marcas reconocidas y que asegurase la discreción. Y aquí aparece BAC, la empresa pantalla sin empleados húngara licenciataria de Golden Apollo. Disponen seguramente de capacidad para sacar del sistema de control internacional los pagos a compañías de los terroristas y, conchabados con el comprador, que se llevaría una suculenta comisión y una nueva vida, cierran el círculo y no dejan sospecha alguna.

Suministran los 5.000 ingenios con los explosivos y una ver saben que están repartidos entre los destinatarios, hay que actuar pronto porque cualquier fallo en un solo dispositivo, podría desvelar toda la trama. Después de dejar unos días a los nuevos sistemas para dar confianza a los usuarios, la operación se activa. Pero no solo llevarían los equipos explosivos, sino localizadores, de tal manera que hay un efecto indirecto mucho más peligroso e importante para Israel, la localización de las bases, lanzadores, cuarteles, arsenales etc. Durante días han tenido localizados a los miembros más prominentes de la organización que son los únicos que podrían relacionarse con otras células.

Comentaba el miércoles por la mañana que seguramente otros aparatos de comunicaciones estarían ya infectados, y como era de libro que comenzarían a sospechar de todos, no podían dilatar más la segunda parte de la operación con los walkies talkies, y bingo, el jueves se pasaba a la segunda fase.

De golpe ha dejado a miles de efectivos de Hezbolá de primer nivel, que son los que están comunicados con el resto de la organización y con el mando, fuera de juego. Momento perfecto para una acción militar. Han desvelado mucho sobre la distribución de fuerzas, su estructura, sus cuarteles, escondites etc. Solo saber dónde ha explotado cada beeper es una información de un valor militar incalculable.

Otro dato que, aunque conocido, se corrobora es que el embajador iraní en Líbano forma parte de la cadena de mando de Hezbolá, lo que evidencia que Irán dirige la guerra contra Israel para atender a sus intereses estratégicos, para los que Gaza, Cisjordania y Líbano son meros instrumentos. Esta directa relación demostrada debería concluir en una acción militar y diplomática definitiva contra Irán. Si no lo hacemos, y Putin ya está negociando un acuerdo nuclear con Irán con el uranio que, en virtud de unos acuerdos incomprensibles fue llevado a Rusia, podemos tener la absoluta seguridad de que la tercera bomba nuclear utilizada contra la población sería lanzada por Irán y contra Israel. Seguramente después serían fulminados, pero cuando uno actúa pensando en la otra vida y movido por razones sobrenaturales, es capaz de las mayores locuras. Esta es la razón más de peso para continuar apoyando militarmente a Israel, su enemigo es el nuestro, y no podemos dejar a la parte más débil y expuesta de Occidente al albur de los deseos de los ayatolás.

Israel, que tiene a medio millón de israelíes trasladados al sur y centro del país en campos de refugiados o familias de acogida desde hace un año, tiene una ventana pequeña para destruir la capacidad militar de Hezbolá en Líbano. Esta acción es imprescindible para la seguridad de Israel y para terminar con el conflicto en Gaza, que en definitiva solo sobrevive gracias al apoyo iraní. La situación en Líbano ayuda, ya que una buena parte del ejército libanés es contraria a la presencia del grupo chiita de Hezbolá, el mayor ejército privado del mundo, y en especial los drusos, que son una parte muy importante de la alta oficialidad del Líbano.

Desde el principio, critiqué la presencia de Naciones Unidas en el sur del Líbano, es una operación que no ha servido para nada concreto, salvo para impedir el derecho de defensa de Israel, porque no ha sido capaz de desarticular ninguna base de cohetes en Líbano, tampoco ha sido nada exitosa la misión en el Sinaí, que sigue siendo tierra de contrabandistas de todo tipo. Dos misiones que perjudican el derecho de autodefensa de Israel, pero que no han podido detener a los terroristas apoyados por Irán.

Son guerras de supervivencia, donde los terroristas solo buscan la destrucción de Israel, y ante una amenaza de semejante tamaño, la defensa pasando al ataque será la más efectiva de las acciones. Actuar a reacción, como hemos visto en Gaza, ha devenido en un conflicto terrible para todos.

Irán se encuentra en una encrucijada: debe decidir si pone el freno a Hezbolá para evitar un daño mucho mayor y un descrédito evidente, o se lanza a una ofensiva de los cuatro países de la coalición: Irán, Siria, Líbano y Yemen, que justificaría una acción militar occidental para destruir la amenaza estratégica que supone Irán para todo el mundo. La consecuencia más importante es que descabezada Hezbolá y reducida su capacidad militar, las posibilidades de alcanzar una paz en Gaza crecerán de forma muy significativa. Pero quedará por resolver la cuestión estratégica con Irán y esto ya implica a muchos más actores.

lunes, 15 de julio de 2024

LOS CUATROCIENTOS GOLPES


 

Recuerdo que la primera vez que vi los 400 golpes de Truffaut. Quedé perturbado por la historia del protagonista, una vida que no sería muy diferente de las 400 tragedias de los menores que vamos a realojar por todo el territorio español. El chaval, Antoine, está condicionado por una vida trágica que le aboca a la violencia y que acabaría ingresado en un reformatorio que él siente como una liberación porque desde allí puede ver el mar, y pensaba en estos 400 niños en un país extraño que esperan a ver su mar particular.

 

Unos años después del estreno de la obra maestra de Truffaut, llegaba a los cines West Side Story, una historia de bandas juveniles de inmigrantes, norteamericanos y portorriqueños en Nueva York. En aquel año, ya se dejaban ver por las principales ciudades de nuestro país  a decenas de bandas de pandilleros como los  Ojos Negros de Usera, algunos estudios enumeran más de cien bandas en aquellos años. Estos jóvenes que suponían una parte pequeña pero creciente de las urbes, cometían más de la cuarta parte de los delitos contra la vida, la honestidad y la propiedad. Muchos de los homicidios y delitos de tráfico de drogas se concentraban en los barrios de Usera, Orcasur, San Blas, La Elipa, Pozo del Tío Raimundo, en Madrid, el Raval y la Mina en Barcelona, Las Palmeras en Córdoba, la Florida en Hospitalet, la Milagrosa en Albacete, la Malvarrosa en Valencia, San Francisco en Bilbao y un largo etcétera que a los más mayores no les será desconocido.

 

La mayoría de estos criminales eran hijos de inmigrantes que habían llegado a las ciudades huyendo de la miseria del campo español. No lo tenían fácil. El gobierno los alojó en guetos, sus colegios estaban infradotados y en los recreos las pandillas hacían su agosto. Los padres de hoy en día habrían sacado a todos sus hijos de esos colegios si los hubieran conocido; solo la iglesia se preocupaba de ellos y a través de numerosas asociaciones procuraban sacarlos de las calles y de los billares donde se trapicheaba con todo.

 

Una parte de la sociedad, ligada al régimen utilizaba los mismos argumentos de las clases burguesas de comienzos del siglo XX: los inmigrantes procedentes de culturas rurales y los gitanos, tenían costumbres absolutamente ofensivas en muchos casos para la vida burguesa de los españoles de bien que se solía decir. No eran pocas las voces que clamaban por su devolución a La Mancha o a las Hurdes, especialmente en las regiones en las que el supremacismo estaba más asentado, los mismos que ahora también se resisten a acoger a inmigrantes de España. En La Mancha, pensaban estos acomodados del sistema, el detective Plinio o el administrador don Pedro, se encargarían de mantenerlos a raya y lejos de sus hijas y empresas.

 

Nuestra novela de la época está llena de estas historias que tanto impactaron en la sociedad. Esas jóvenes de familia bien, como Teresa atraída por los Pijoapartes charnegos, que se introducían en el submundo de las drogas y la marginalidad, para disgusto de sus padres. En el  recordado periódico El Caso encontramos cientos de personajes arrastrados a la violencia porque nadie les dio otra opción, igual que los protagonistas de Albert Camus.

 

Todos estos barrios que fueron de acogida de millones de inmigrantes, hoy están repletos de latinos, rumanos, y marroquíes y como si la semilla del mal anidara en sus calles, son los sucesores de aquellos pandilleros. ¿Qué tienen en común los inmigrantes manchegos o andaluces de los sesenta o de los veinte con los de ahora?: la pobreza, la marginalidad, el odio y la incomprensión. Estos como aquellos deben someterse a las normas de la clase dominante y si no, sufrirían el acoso y la persecución policial que estaba al servicio del poder.

 

Hoy muchos afirman que el peligro de los musulmanes está en sus costumbres, lo mismo que decían de los maquetos o charnegos, tratados con el mismo desprecio que hoy exhiben con los extranjeros, y que mostraban el mismo supremacismo de hoy en día.

 

La historia a veces es tozuda y ahora muchos de estos supremacistas son nietos de los que acudieron a buscarse la vida al País vasco, Cataluña o Madrid, son como esos latinos republicanos que apoyan la construcción del Muro en la frontera olvidando que son producto del sistema que quieren destruir.

 

La decisión de Vox de coger una pataleta por negarse a aliviar la presión existente en Canarias, representa el mismo concepto elitista que quieren ofrecer a la sociedad. Como aquellos burgueses de las capitales, aspiran a tener trabajadores serviciales, baratos y aislados y que cumplan con las leyes y soporten la marginación con estoicismo.

  

Es cierto que la política obliga a realizar pactos complejos y que siempre se realizan con afines en algunas materias, pero no con iguales. La decisión de Vox de abandonar los gobiernos, más allá de que obedece a una decisión política personal, que es buscar la palmadita de Marie Le Pen o de Víctor Orban, el amigo del genocida Putin, es una muestra de irresponsabilidad y de insolidaridad y contiene un factor de falso oportunismo político, aunque después del golazo Lamine contra Francia, se le ha caído una buena parte del argumentario. 

 

Claro que hay un abismo entre el PP y Vox; tener contrincantes comunes en algunas cuestiones mollares, no te hace igual ni aliado. El Partido Popular sabe dónde están los límites éticos que otras formaciones violentan sin pudor. Por muchos delitos que cometan, no podemos echarlos al mar como quieren los palestinos con los judíos, ni exterminarlos como aquella anécdota histórica a la que se refirió Jean Marie Le Pen ni devolverlos a no sé dónde para que vuelvan otra vez a ver si hay suerte y se ahogan en intentos posteriores.

 

En materia de inmigración hay mucho por hacer y el gobierno ni resuelve ni aborda todos los problemas, pero no podemos condenar a cuatrocientos niños o 4.000 porque el gobierno no ha cumplido sus obligaciones. Vox está a tiempo de reconsiderar su posición, de si quiere ser un partido serio de coalición o la alternativa a Alvisse, pero tragar con lo éticamente inaceptable no vale para salvar uno o cuatro gobiernos. Algunos de pluma suelta dirán que Feijoo se abraza al felón, no es el caso, hacer lo que hay que hacer no es cuestión de táctica política sino de principios y responsabilidad. Ahora bien, el gobierno no puede seguir permitiendo este flujo incontrolado y hay que hacer un plan integral que debe centrarse en facilitar la llegada de inmigrantes regulares y acabar con las mafias, controlar las costas vecinas y sobre todo debemos acabar con el efecto llamada, y en esto todavía hay mucho por hacer al interior de nuestro país.

 

viernes, 28 de junio de 2024

LOS MERCADOS APUESTAN POR LA DEFENSA ¿HASTA CUÁNDO?

LOS MERCADOS APUESTAN POR LA DEFENSA, ¿HASTA CUÁNDO?


Una guerra es a la industria de Defensa lo que una pandemia a los fabricantes de geles hidroalcohólicos y vacunas. Son dos sectores que se benefician de hechos impredecibles y con un alcance muy doloroso, y que necesitan anticiparse a estos improbables fenómenos invirtiendo en investigación y sosteniendo las líneas de producción durante mucho tiempo sin grandes expectativas de beneficios. Como vimos en 2020 con el COVID y ahora con la guerra de Ucrania, la percepción sobre la necesidad de invertir y el precio de los productos se convierten en algo irrelevante cuando hay bienes tan importantes en juego.

Por estas razones, evaluar a largo plazo a la industria de Defensa por las circunstancias particulares de una amenaza o un conflicto, será siempre sesgado, ya que llegará un momento, que esperemos que sea pronto, en el que se desinflará el globo y todo lo avanzado puede quedar en aguas de borrajas. Con esta perspectiva debemos juzgar a este sector que vio desaparecer al 70% de sus industrias militares en Estados unidos al terminar la Segunda Guerra Mundial.

Durante años se escuchaba decir en los despachos de financieros y directivos de empresas que lo mejor para conseguir financiación o mejorar la salud del inversor era ocultar la actividad de Defensa. Nos sorprenderíamos ahora de ver a empresas que negaban formar parte del sector por razones de oportunidad, y que por la misma razón ahora espolean a los cuatro vientos su carácter militar, es legítimo y además oportuno.

Resulta difícil evaluar a un sector cuya salud depende de lo que sus gobiernos decidan poner en el presupuesto de Defensa, más en casos como el español, donde aprobar presupuestos se ha convertido en una tarea casi imposible. Da igual lo mucho que una empresa pueda invertir, o lo eficiente que sean sus procesos internos, sin demanda, están condenadas a la desaparición. Si la contratación es muy alta, todos las deficiencias serán maquilladas por el incremento de las ventas.

También resulta difícil examinar una industria que tiene tan pocas empresas cotizando en bolsa, teniendo en cuenta que muchas de ellas son familiares o participadas por fondos de inversión, y en algunos países, con una importante participación estatal en el accionariado. Pero a pesar de todo ello, sea quien sea el propietario, los objetivos de las empresas son los mismos: la rentabilidad sostenida a largo plazo, la innovación y la presencia en terceros mercados, por lo que la sensibilidad de los mercados será la misma con independencia de la estructura de propiedad de cada empresa.

Si analizamos el caso del mercado español, a pesar de que estamos en una fase expansiva de la inversión militar, no podemos olvidar que entre 2008 y 2018, hubo contratistas principales que no recibieron ningún contrato significativo, debido a la contracción de la demanda. Como esta época de crisis no coincidió con ningún factor de inseguridad global, no se arbitraron medidas para mantener el sector. Poco o nada preocupaba que desapareciera. Ahora con la plena expansión del conflicto de Ucrania, aquellos que más sufrieron la crisis por enfocarse exclusivamente en el campo militar, son las que más rentabilidad están obteniendo, pero si la guerra de Ucrania no se hubiera producido, el 50% de este sector ya habría cerrado sus puertas en Europa.

Sin este esfuerzo del sector privado militar en España en estos años de sequía, ni compensado ni valorado, no habría ahora industria militar en Trubia, en Palencia, Granada, Madrid, Burgos, Valdepeñas, Navalmoral, Albacete o Zaragoza y a Ucrania estaríamos enviando uniformes y raciones de campaña.

Nadie se preocupaba entonces de conceptos como el campeón nacional porque no había nada que recompensar a tan digna posición. Pero, por esa misma razón, pensar que esta situación va a durar siempre, sería un grave error. Un día Putin, se levanta de una noche con su joven novia, sufre un infarto, lo entierran en la Plaza Roja, y de golpe y porrazo la mitad de los programas cancelados. Es cierto que existen otros muchos puntos calientes en el mundo, y en particular China, pero todos ellos ya lo eran hace diez años cuando los presupuestos de Defensa estaban por los suelos.

¿Cómo descontar esta volatilidad a la hora de adquirir una empresa o de hacer una inversión? La respuesta está en la fe, nadie puede asegurar que la situación será igual, mejor o peor en un año, así que la oración puede resultar más beneficiosa que la planificación.

Este cuadro refleja a las principales empresas de Defensa con presencia más o menos intensa en nuestro país. Lo primero que llama la atención es la diferencia de tamaño entre las empresas españolas, italianas o alemanas que han tenido presupuestos de Defensa exiguos durante años de dividendos de la paz, con las de Francia, Reino Unido y Estados Unidos. La primera lección que nos muestra esta realidad es que solo los gobiernos que tienen una política activa militar con independencia de las circunstancias coyunturales, tienen más recorrido innovador y en consecuencia, sus empresas tienen más valor. Todas estas grandes compañías hace diez años ya tenían una enorme capitalización cuando Indra apenas llegaba a los mil millones de valor bursátil, por poner un ejemplo.

La diferencia entre Indra, nuestro líder en los sectores de las IT, sensores y ciberseguridad, y los gigantes con presencia en España como Airbus, General Dynamics o Rheinmetall es enorme, y esta es una debilidad para la industria nacional que debe competir fuera con gigantes y a su vez un reto que solo puede compensarse con una clara apuesta del gobierno por nuestra industria.

La segunda lección y quizás la más importante, es que los gobiernos deben aprender que vivimos en un entorno perpetuo de inseguridad, que la amenaza nuclear no se va a disipar y que con total seguridad, en diez o veinte años, tendremos que afrontar otro reto similar. El esfuerzo de la sociedad occidental por su defensa no puede ni debe terminar con el fin de la amenaza en Ucrania, sino que estamos abocados a mantener un esfuerzo superior al 2% del PIB, para que cuando venga un enemigo de verdad, no nos pille con el pie cambiado o suplicando a los americanos que nos ayuden, porque a saber qué puede pensar la Casa Blanca en diez o veinte años. Si el mensaje es claro, las empresas podrán prepararse y definir sus estrategias, pero si se trata de hacer caja a corto plazo, tengo la impresión de que la alegría va a durar muy poco. Sin guerra, la presión social por el pacifismo puede hacer estragos en Europa, y esto solo se compensa con un gran sentido de la responsabilidad de los gobiernos, de que sean capaces de decir no a muchas necesidades para continuar invirtiendo en seguridad y en esto sí que muchos analistas pueden predecir el resultado.


domingo, 2 de junio de 2024

THE EUROPEAN LAND DEFENSE INDUSTRY AND THE RUSSIAN THREAT (II)

 



To understand the current state of the sector and where it will move in the coming years, we must analyze what results the weapons systems sent to Ukraine have given. MRLS systems like Himars, air defense systems such as the Patriot and the wide range of European missiles and UAVs, have been the differentiating elements. However, the outdated combat vehicles have hardly been effective, not producing the desired effect, the reason is that only new technologies set the course for this war as for all others. The tanks that were going to represent a qualitative change last summer, today no longer exist, they are broken down or preserved for a few operations.

    The three parameters of combat success in history remain the same: mobility, firepower and protection, the point is that in the face of changing threats, these three elements must be updated quickly to be effective.

    If we talk about battle tanks we have two opposite experiences. The tremendous Russian losses in Ukraine from drone attacks, close-range rocket launchers and improvised devices. Russia has lost more than four thousand combat vehicles, while in the same threat environment, Israel has not lost any Merkava in Gaza. The difference is undoubtedly the Trophy Active Protection System. Nowadays, the difference between having an effective tank or a target with little ability to avoid a direct attack and very vulnerable is active protection, like the Israeli Rafael, the German ADS or the Russian Arena, all of them with significant limitations when its defensive ammunition runs out. On the other side, they add very valuable additional protection. Hence, a good part of countries has embarked on processes of acquiring new cars with these systems, such as the new Leopard 2A8. For this same reason, the EuroTrophy GmbH consortium has been established among KDNS, GDELS and Rafael Advance Defense Systems, to Europeanize a critical solution for all combat vehicles.

    Seven countries have acquired or are going to acquire this expensive version, worth close to thirty million each; three times more than our Leopard 2E. The new tanks incorporate 55-caliber cannons, even Rheinmetall is working on a 130 mm cannon, but this will be joined by remote stations, greater armor on the top and anti-drone drone swarm systems. Spain should consider modernizing our cars with these types of solutions to keep them at the forefront of the state of the art. In Europe, Italy has abandoned the manufacture of its Ariete and will opt for the Leopard 2A8, while France and Germany are thinking about a tank of the future, which leaves the Leclerc as a car in need of a profound modernization and the same goes for the Challenger. 2 British.

    Battle tanks pose great limitations due to their weight, which is already around 70 tons, together with the fact that their effective fire range is still very short, requiring them to get closer to the target, which makes them vulnerable. Tracked combat vehicles have almost all the advantages of tanks, but weigh about 20 tons less, which allows them to be transported and deployed more quickly. They also have a lower signature, which increases their capacity in the battlefield. 

    Currently, the European track vehicle market is led by the ASCOD from General Dynamics and the Puma from KDNS Germany and Rheinmetall, while others such as the CV-90, the Dardo, or the Marder have been left behind by not incorporating more innovative solutions. The Polish Borsuk, derived from the Korean K-9, is also very far from the previous ones in terms of performance.

    GDELS presented at the recent arms fair in Romania, the ASCOD incorporating the Elbit Trophy system, which together with improvements that may include the armor to bring it to a level similar to tanks and a tower with a cannon of up to 120 mm, can offer very similar and more efficient capabilities than the battle tank.

    Finally in the field of combat vehicles on 8x8 wheels, the market is broader with AMV vehicles from Patria, Piraña III and V from GDELS Boxer from KDNS Germany, Centauro and Freccia from Iveco Oto Melara, Pandur from GDELS and VBCI from KDNS France. All of them, with weights greater than 30 tons, some of them exceeding 42 tons, offer capacities close to the previous ones, but in exchange they offer much more efficient transportation and mobility, equipping the same weapons systems as the previous ones.

    Today we can say that the mobility triad that all European armies must equip should include battle tanks with active protection systems, tracked vehicles with similar ones and 8x8 vehicles with a minimum level five of protection as in the case of the Romanian VBCI, to compensate for the absence of other additional protection systems.

    Taking into consideration that Russia in speeding up the pace of deliveries, Europe should´t allow this big gap it would be too dangerous.

    In recent years, the countries that have opted for new Leopard 2A8 tanks are: Germany (18 ordered + 105 option); Holland (18 ordered) Norway (54 ordered + 18 option) Lithuania (50 planned) Czech Republic (70 planned) besides these program I should add the modernization of 44 Danish tanks to version 2A7 that is in progress. The British Challenger 3 will incorporate the Trophy system. Only the Leclerc continues to put more emphasis on passive protection systems. It is to be hoped that at least the large Leopard user countries will orient themselves to the most modern versions and that those of the M-1 Abrams such as Poland can be equipped with the same solution.

    Among track vehicles, the main programs launched in recent years are: Denmark (44 CV90 from Bae Hagglunds); Norway ( 104 CV90, in 2009 and 144 CV90, in 2012) Sweden ( additional 50 CV90 in 2023), Czech Republic ( 230 CV90 in 2023) Slovakia (152 CV90 in 2022) Poland (1400 Bursuk planned) Germany ( Puma  additional 50 in 2023) United Kingdom (589 ASCOD in 2012) Spain (394 signed in 2024), Hungary (218 Lynx signed in 2020) and Greece (250 Lynx in 2023). Many of these acquisitions are continuations of previous orders.

    The countries that have already initiated preparatory actions for new vehicles of this class are Portugal to replace its 200 M-113s;  Estonia, which has already made a short list among Otokar, Hanwha and ASCOD for acquisition in 2028; and Romania, which has already launched a potential purchase of 246 vehicles plus an option of 52 for 2031 and in which the Lynx and ASCOD compete. Germany has acquired Automecanica, a truck manufacturer for local manufacturing while GDELS already has a company in production with the Piraña V. The presentation at the recent ASCOD Black Sea Aerospace & Defense in Bucharest with the Rafael Trophy, which also has a strong market position within the country places Spanish vehicle in a more favorable starting position.

    France and Italy should launch their replacement programs for the obsolete AMX-10 and Dardo, although these are undergoing a modernization that could extend their life by ten more years.

    Germany will have to address the continuity of the Puma for the next decade. It has developed the Lynx designed for the foreign market to which an active protection system could be incorporated such as the Hensoltd MUSS that the German Puma incorporates. It could be an option, but it does not seem that the vehicle currently meets the requirements of the Bunderwehr, so options for other vehicles such as the CV 90 and the ASCOD could find accommodation in a country that has been leading global armored vehicle manufacturing for almost a century. While countries that do not have modern vehicles of these characteristics, such as Belgium and Bulgaria, should consider acquiring this capacity.

    In the world of 8x8 wheeled vehicles (I exclude the 6x6, although there is now a tendency to recover their values and the Patria 6x6 platforms have been sold in several countries such as Sweden with 321 units recently) the most renewed platforms that are currently offered by the industry are the Piranha V from GDELS, the VBCI from KDNS France, the Boxer from KDNS Germany, the Freccia from Iveco Oto Melara, and the AMV from Patria. I left out the GD Co (USA) Stryker even though Bulgaria signed an FMS contract last year to acquire 183 Strykers.

    Among the most recent acquisitions are: Netherlands (38 Boxers planned for 2025); Italy (Freccia 30 in 2019, more acquisitions expected until the development of the new VCC platform is completed); Denmark (360 Piranha V in 2016); Romania (380 Piranha V between 2018 and subsequent extension) Poland (150 Rosomak-L, a longer version, in 2023, plus 150 vehicles sold to Ukraine in 2023, financed by American and European funds) Germany (Boxer 122 new order), United Kingdom (Boxer 523 in 2019) Spain (348 Piranha V local name Dragon in 2019 out of a total of 998 units in three series) Lithuania (88 Boxer in 2016). In general, all countries are updating their older versions, incorporating the recently implemented solutions in new acquisitions.

    Countries that will need to embark on wheel programs in the short term, are Greece and Norway which lack this capacity. Added to this is that both Germany and France will have to significantly increase their supply of combat vehicles since their current number seems very small for the size and relevance of their armies.

    The fourth key aspect will be the 155mm self-propelled artillery. There are still several countries that have US systems from the 70s such as the M109, as is the case of and Spain. The only operating platform of European design is the PZH 2000, although it is a rather old. Currently, wheeled platforms with the capacity to carry a 155/52 or 55 caliber howitzer will be the ones that will dominate this market in the next thirty years, since they are more versatile platforms, with less signal and weighing less than the PZH 2000. by about 15 tons, which is a very substantial difference. The new GDELS 10x10 platform with the KDNS Germany tower will allow, thanks to the distribution of the recoil over five axes, a very efficient shot in motion, which reduces its vulnerability and increases its effectiveness and will undoubtedly be a reference in the coming decades, both for howitzers and a platform for the Himars or the Puls. Taking into consideration the obsolete European fleet in main armies of M109 155mm or those coming from Soviet era of 152mm, as MRLS, the number of platforms should be replaced would be 691 ATP 155/152mm y 370 MRL systems.


    Conclusions

Europe has a great challenge ahead, very significantly increasing its units of state-of-the-art combat vehicles and artillery. However very important programs have been launched, as in Spain or Poland, the five major European armies need to increase their resources, and in an accelerated manner. The self-propelled artillery and MRLS programs are also essential, and the units in the process of incorporation are a tenth of the needs.

    Many may wonder if, given the weaknesses shown by Russian weapons and its industry, this rearmament process is necessary. There are two reasons that support this theory. Russia has preserved its combat aviation and air defense systems in Ukraine, even sacrificing a quick victory, and Russia has begun the production of its latest generation vehicles and although the rates are slow, they are already much faster than the European ones, which shows that this production is not designed for Ukraine.

    Europe needs to have a capacity to defeat Russia militarily, not just to stop it, and it is not a question of ambition or aggression, it is that only enormous conventional military superiority can counteract Russia's tactical nuclear capacity, if we are not willing to develop tactical nuclear weapons. The best way to defeat Russia and return it to the sphere of democracies and freedom is to defeat it industrially and technologically. When Russia knows that it cannot win, if it can destroy us but it will entail its self-destruction, it will be doomed to change its foreign and security policy, which is the ultimate objective, the peace and security of the continent and the world.